Por Marisela Presa
Mayo 12 del 2007
La puntualización de las medidas para la reducción de desastres constituye la esencia del ejercicio Popular Meteoro 2007 que durante los días 19 y 20 de mayo se desarrollará en la provincia de Granma.
En esta oportunidad serán detalladas las medidas de prevención, respuesta y recuperación ante un desastre, la comprobación del funcionamiento de las estructuras de dirección y mando y el desarrollo de actividades prácticas en la población que refuercen hábitos y conductas que permitan reducir nuestras vulnerabilidades.
Como se conoce, a partir del primero de Junio se inicia la temporadas ciclónica, uno de los peligros más importantes que acecha a nuestro territorio, aunque resulta también importante estar preparados para enfrentar cualquier otro tipo de amenazas que puedan estar identificadas , como pueden ser sismos, intensas lluvias, sequías o epidemias que puedan afectar a personas, animales o plantas.
En Granma cada ejercicio Meteoro ha motivado la participación popular, por lo que en las instituciones, organismos y territorios las fuerzas especializadas y la población han respondido con gran disciplina a la convocatoria, alcanzando y transmitiendo experiencias indispensables para resguardar los bienes humanos y materiales.
Precisamente y como parte de la preparación para el enfrentamiento a la temporada ciclónica a partir del lunes 14 y hasta el 20 de mayo, tendrá lugar la semana para la reducción de los desastres.
En estos día se motivarán acciones que eleven la calidad de la vida de la población, por lo cual se laborará en la limpieza e higienización de nuestras viviendas, centros de trabajo y pueblos y comunidades, en la desobstrucción de zanjas y canales, poda de árboles, limpieza de azoteas, en todo aquello que permita estar mejor preparados para el ejercicio Meteoro de los días 19 y 20, y para enfrentar ya el inicio de la temporada ciclónica que comienza el primero de Junio.
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Una jornada de aporte, un domingo hacia el Primero de Mayo
Por Marisela Presa
Abril 29 del 2007
Para los granmenses este domingo 29 de abril ha sido una jornada de fortalecimiento ideológico y moral, al incorporarse masivamente hacia las diversas labores productivas y sociales de manera voluntaria, dedicando el esfuerzo al primero de Mayo, Día Internacional del Trabajo.
Según partes preliminares de la Central Sindical de la provincia cubana de Granma más de 124 mil trabajadores se habían reportado en tareas productivas, eso sin contar los miles de campesinos que desde temprano estuvieron en sus áreas de trabajo, los cederistas y federadas que engalanaron cuadras y barrios, y los estudiantes que aprovecharon el día para embellecer sus centros de estudios.
Convocado por la Central de Trabajadores de Cuba el trabajo voluntario contó en la provincia con estímulos especiales, porque los granmenses andan en la marcha para conquistar, nuevamente, la celebración aquí de las fiestas por el Día de la Rebeldía Nacional que cada año conmemoramos el 26 de Julio.
Se pudo apreciar esfuerzo y cambio de labor. Por ejemplo dirigentes provinciales de partido y gobierno estuvieron desde temprano en una de las fábricas de la Industria de Materiales de la Construcción, Cerámica Roja, para colocar en los camiones miles de bloques de arcilla dirigidos a la edificación de viviendas en el costero municipio de Niquero.
Este tipo de actividad se viene realizando desde hace varios meses con un fuerte respaldo del transporte de la economía, pues, llevar a más de un centenar de kilómetros estos elementos constructivos demanda un significativo volumen de recursos, sobre todo dirigido a los municipios que sufrieron las afectaciones del huracán Dennis.
También obras que se construyen aquí en Granma, como son los Policlínicos comprometidos con el Comandante en Jefe, recibieron este domingo un fuerte respaldo.
Allá en el sureño territorio de Pilón donde se levanta ya el policlínico Manuel Sánchez Silveira, y o el policlínico Bayamo en la capital provincial recibieron ese esfuerzo siempre provechoso que significa mano de obra con buena voluntad, los de Río Cauto y el de Campechuela.
Desde que comenzó en año, y con un comprometimiento especial los granmenses cada domingo de una u otra manera se han estado movilizando hacia las tareas productivas de manera voluntaria.
Y hay que decir que este esfuerzo da trigo. Así van avanzando numerosas obras y tareas porque cuando se aprecia a todas luces la razón es que la provincia no se quiere quedar atrás.
El 2006 realmente fue un año de resultados y reconocimientos para el territorio, y a esta imagen real de trabajo que hoy llena la vida de los granmenses hay que incorporarle necesariamente, un nuevo año con nuevos resultados.
El martes será primero de Mayo, y para la jornada del lunes, la central obrera en la provincia convocó un matutino especial donde la CTC puntualiza como se celebrará el Día Internacional de los Trabajadores.
Habrá marchas y concentraciones, carteles, banderas, consignas, resultados, pueblo, y una clara conciencia de por qué estamos movilizados.
Allá en el norte los vecinos que acogen en su madriguera al terrorista y verdugo, el Señor Carriles, les retumbará nuestra fuerza, condenaremos su arbitraria libertad y le recordaremos con nuestra presencia al mundo, que aún anda suelto el mal, que tanta vida joven ha destruido.
Acá en la Cuba revolucionaria de todos los tiempos, como hoy entusiasmados con el trabajo, ayer convocados por la libertad, mañana definidos por la lucha que nos sustenta y nos define.
Así están los granmenses, hoy en vísperas del Primero de Mayo.
sábado, mayo 12, 2007
Preparados, aunque venga un solo huracán
Por Marisela Presa
Mayo 8 del 2007
El mes de mayo se presenta perturbador. Este es el periodo más intenso de preparación quizás pudiera decir sicológica de lo que será la temporada ciclónica.
Al final de este mes, desde hace ya unos cuantos años, los necesarios ejercicios para la preparación de la población y también de la economía para enfrentar diversos tipos de desastres.
Pero los más perturbadores, hasta ahora, en el área del Caribe, son los huracanes. Claro que no hemos olvidado ni un instante que también estamos en una zona sismogeneradora, que de vez en vez, lanza sus corcoveos, y pone a pensar a más de uno.
Más lo que me ocupa hoy son los huracanes.
El 2006 se fue bien. Bueno, porque ya casi en septiembre apareció El Niño que debilitó la aparición de huracanes al final de la temporada.
Según he estado leyendo, hay pronósticos no muy halagüeños para este 2007. Que también han predecido que será un período activo para esta cuenca del Atlántico.
Y decía Aunque venga un solo ciclón hay que estar preparado. No importa si es uno o 17, o los que pronostiquen los interpretadores del clima, lo importante es tener una preparación que nos permita preservar lo que hemos logrado, proteger a la gente, que nadie sea lastimado y que también nuestros bienes, adquiridos con muchísimo esfuerzo, estén a buen recaudo.
Por eso, aunque venga uno solo. Pero si ese viene cerca o sobre tierra, por algún descampado o por algún lugar poblado, siempre habrá algo que proteger.
Proteger no es de un momento para otro. Proteger lo que tenemos es un concepto, es una manera de actuar, de conocer que hacer en cada instante y de actuar de manera solidaria y conjunta para no dejar a nadie ni a nada por detrás.
En toda Cuba, desde Maisí a San Antonio tendremos los días 19 y 20 lo que los cubanos hemos llamado el Meteoro, algo así como una alegoría al fenómeno al que enfrentaremos. A veces en seco, otras en mojado de verdad. Y muchos a partir de un supuesto, pero siempre sobre un basamento de la realidad.
Lo interesante del asunto, es que la jornada se asume con gran seriedad, se organiza el programa, se proyectan medidas, se visualiza como realmente un fenómeno natural o provocado podría afectar a la comunidad, y cuáles son las acciones, las fuerzas y las respuestas que cada situación merece.
Bueno a lo que iba al inicio. Lo mejor que nos puede suceder es que no sea ninguno. Que ninguno de los huracanes que puedan ser pronosticados toque un punto de nuestra geografía. Pero si no podemos manejar a nuestro gusto ni a los paralelos ni a los meridianos, ni a las bajas ni a las altas presiones, ni al sentido de los vientos, ni podemos bajarle la temperatura al mar, entonces tendremos que estar preparados.
Y podemos hacer un poco más, contribuir también de cierta manera a preservar nuestro planeta para no contribuir a su destrucción, a sus variaciones de clima, a la fragilidad que se quiebra con el desconsiderado, vertiginoso y controvertido desarrollo de la depredadora especia humana.
Para ello se ha de estar preparado
Mayo 8 del 2007
El mes de mayo se presenta perturbador. Este es el periodo más intenso de preparación quizás pudiera decir sicológica de lo que será la temporada ciclónica.
Al final de este mes, desde hace ya unos cuantos años, los necesarios ejercicios para la preparación de la población y también de la economía para enfrentar diversos tipos de desastres.
Pero los más perturbadores, hasta ahora, en el área del Caribe, son los huracanes. Claro que no hemos olvidado ni un instante que también estamos en una zona sismogeneradora, que de vez en vez, lanza sus corcoveos, y pone a pensar a más de uno.
Más lo que me ocupa hoy son los huracanes.
El 2006 se fue bien. Bueno, porque ya casi en septiembre apareció El Niño que debilitó la aparición de huracanes al final de la temporada.
Según he estado leyendo, hay pronósticos no muy halagüeños para este 2007. Que también han predecido que será un período activo para esta cuenca del Atlántico.
Y decía Aunque venga un solo ciclón hay que estar preparado. No importa si es uno o 17, o los que pronostiquen los interpretadores del clima, lo importante es tener una preparación que nos permita preservar lo que hemos logrado, proteger a la gente, que nadie sea lastimado y que también nuestros bienes, adquiridos con muchísimo esfuerzo, estén a buen recaudo.
Por eso, aunque venga uno solo. Pero si ese viene cerca o sobre tierra, por algún descampado o por algún lugar poblado, siempre habrá algo que proteger.
Proteger no es de un momento para otro. Proteger lo que tenemos es un concepto, es una manera de actuar, de conocer que hacer en cada instante y de actuar de manera solidaria y conjunta para no dejar a nadie ni a nada por detrás.
En toda Cuba, desde Maisí a San Antonio tendremos los días 19 y 20 lo que los cubanos hemos llamado el Meteoro, algo así como una alegoría al fenómeno al que enfrentaremos. A veces en seco, otras en mojado de verdad. Y muchos a partir de un supuesto, pero siempre sobre un basamento de la realidad.
Lo interesante del asunto, es que la jornada se asume con gran seriedad, se organiza el programa, se proyectan medidas, se visualiza como realmente un fenómeno natural o provocado podría afectar a la comunidad, y cuáles son las acciones, las fuerzas y las respuestas que cada situación merece.
Bueno a lo que iba al inicio. Lo mejor que nos puede suceder es que no sea ninguno. Que ninguno de los huracanes que puedan ser pronosticados toque un punto de nuestra geografía. Pero si no podemos manejar a nuestro gusto ni a los paralelos ni a los meridianos, ni a las bajas ni a las altas presiones, ni al sentido de los vientos, ni podemos bajarle la temperatura al mar, entonces tendremos que estar preparados.
Y podemos hacer un poco más, contribuir también de cierta manera a preservar nuestro planeta para no contribuir a su destrucción, a sus variaciones de clima, a la fragilidad que se quiebra con el desconsiderado, vertiginoso y controvertido desarrollo de la depredadora especia humana.
Para ello se ha de estar preparado
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