lunes, julio 26, 2010

Rememoran en Bayamo asalto al Cuartel Carlos Manuel de Céspedes

Confirman los jóvenes con su presencia la continuidad del pensamiento revolucionario de los caídos el 26 de julio de 1953
Por Marisela Presa
Julio 26 de 2010

Con una descarga de fusilería, el cantío de los gallos, y el murmullo de voces que se agigantan, se despertó hoy el antiguo cuartel Carlos Manuel de Céspedes, devenido en Parque Museo Ñico López, para rememorar la histórica jornada del 26 de Julio de 1953.

Un grupo de revolucionarios, 25 jóvenes con la convicción de la lucha que se iniciaba, habían asaltado la fortaleza para respaldar la acción similar que en ese propio momento, se escenificaba en el Cuartel Moncada de Santiago de Cuba, se iniciaba así la última etapa de la epopeya de la gesta independentista.

Correspondió a jóvenes estudiantes secundarios bayameses la reedición del asalto, distinguidos por su uniformes verde olivo, y henchidos de orgullo por saberse continuadores de los que hace 57 años ofrendaron sus valiosas vidas por alcanzar la Patria nueva soñada por José Martí.

Una ofrenda floral ante el busto de Ñico López que señala la entrada a este parque histórico, devenido en Museo desde 1978 y Monumento Nacional desde el 2004, teniendo en cuenta su significación histórica y valores arquitectónicos.

Como en tantas ocasiones acudió el pueblo bayamés para rendir tributo a los héroes, y el acostumbrado pase de lista para rendir homenaje a cada uno de los caídos, retumbó en la cálida madrugada, confirmando que nunca morirán y que siempre estarán en orgulloso pecho de su pueblo.

En aquella madrugada del domingo 26 de julio de 1953, a la entrada del otrora cuartel fueron asesinados, tras haber sido detenidos, los jóvenes asaltantes Mario Martínez Arará y José Testa Zaragoza. En la acción sólo había caído un combatientes, 10 fueron luego vilmente asesinados.