Atención con Irene, es un huracán
agosto 22 de 2011 2.32pm hora de Cuba
Por Marisela Presa
Realmente la presencia en el área del Caribe de una Tormenta Tropical o de un Huracán nos preocupa, sobre todo porque conocemos, por experiencia propia, cuanto afecta a una nación un fenómeno natural de esta categoría.
Nuestras sugerencias es estar atentos a las informaciones que emitan los Institutos Meteorológicos, pero sobre todo los locales, que conocen perfectamente el comportamiento de los sistemas en cada territorio, así como las indicaciones que haga en cada región la Defensa Civil, que conoce perfectamente cuáles son los peligros que les acechan y cuáles son las medidas preventivas. Ser disciplinado, ecuánime y lógico es esencial.
En segundo lugar realizar acciones que posibiliten preservar nuestra vida y la de los demás, sobre todo la familia pequeña.
Hervir el agua, tener almacenada agua potable, contar con alternativas de alumbrado y para el cocimiento de los alimentos, tener medicamentos necesarios para una emergencia, de esos que todas las amas de casa guardan en su botiquín. Pero lo más importante es que uno ha de resguardarse. No cruzar aguas crecidas ni peligrosas, no situarse el lugares donde puedan ocurrir posibles derrumbes, destupir tragantes, quitar macetas de balcones y limpiar los dreanjes de las azoteas.
Mucho cuidado con las antenas de los televisores, pueden ser derribadas y caer sobre tendidos energizados. No tocar ningún cable eléctrico que se encuentre en el suelo, y si es necesario trasladarse a casa de amigos, familiares o vecinos con mejores condiciones donde guarecerse durante el paso del meteoro, eso sería mucho mejor. Son asuntos elementales pero que aveces olvidamos.
Si en nuestra casa existe la posibilidad de la entrada del agua, entonces esas pertenencias que pueden deteriorarse ponerlas en alto y tratar de resguardarlas cubriéndolas con naylon u otras lonas. Y si piensa que su techo podría no resistir, pues nada, hay que amarrarlo, pasarle sogas, o poner bolsas llenas de arena para que el viento no se lleve esas tejas de zinc o de fibro.
Si es necesario, puede podar los árboles que esten alrededor de su vivienda y considere que una de sus ramas les puediera afectar. La experiencia vale mucho para estos casos, así que cada cual con su inventiva ante un huracán puede ayudar también a proteger su vida, sus pertenencias y las de sus familiares.
